El estudio hace un análisis sobre el discurso del amor idealista y su influencia en los roles de género en las películas de romance y las comedias románticas hollywoodenses. Se seleccionaron dos filmes contemporáneos: Ruby Sparks y La la land, que sirven para ejemplificar que el cine de Hollywood funciona como transmisor del amor idealista y de lo roles de género tradicionales. El amor idealista se construye sobre la adaptación de tres conceptos del amor clásico: eros, philia y ágape. La combinación del placer sensible, la amistad y la aceptación incondicional por el otro supone un amor “perfecto”; es decir, un amor idealizado. Este tipo de amor es uno de los recursos narrativos más usados en las películas de Hollywood, en donde la mayoría de las veces se cuenta la historia de una pareja heterosexual que logra superar los obstáculos que se le presentan y culmina con un final casi siempre feliz. Ambas películas se ponen en contraste con el mito griego de Eros y Psique, en cuestión de estructura, pues se detectaron similitudes entre los discursos de los filmes y el mito. Los discursos de las películas están construidos a partir de ciertos imaginarios sociales que existen en un contexto social determinado. Bordwell (1996) explica que para que el espectador pueda comprender una película, esta debe de estar formada por “prototipos”, pues son estos los que sirven como agentes de identificación. Estos “prototipos” son lo que Castoriadis (2013) llama: imaginarios sociales. Estos se entienden como los símbolos y significaciones que conforman una sociedad en un contexto histórico-social determinado; es decir, que los imaginarios se construyen a través de las creencias o imágenes colectivas. Por lo que se puede decir que el cine ha perpetuado los imaginarios sociales sobre los que se construye, la búsqueda de ideales y la imitación de roles.