La discusión en torno al concepto de extensión universitaria se ha multiplicado en el ámbito de las universidades argentinas y de toda América Latina. Se cuestiona profundamente la concepción de la institución educativa que se “extiende” o “construye puentes” hacia la comunidad como si la comunidad fuese un “otro” y la universidad una “torre de marfil”. Se busca que la universidad recupere su misión esencial de formación integral de nuevas generaciones, articulando la calidad académica con el compromiso social. Producto de esta búsqueda y, como resultado y objeto de proyectos de investigación-acción, surge “De UNA. Programa de apreciación y experimentación con lenguajes artísticos”, una propuesta de aprendizaje-servicio diseñada y realizada por estudiantes, graduados y trabajadores no docentes de las carreras del Área Transdepartamental de Crítica de Artes de la Universidad Nacional de las Artes para promover diversos modos de expresión. Se realiza en el marco del Programa de Centros de Día para Personas Mayores de la Ciudad de Buenos Aires (que, desde hace más de treinta años, ofrece diferentes actividades para promover el cuidado, la autonomía y el envejecimiento activo en espacios distribuidos por los barrios porteños). De UNA tiene, desde el comienzo, como uno de sus principales desafíos, desarrollar un dispositivo enunciativo que habilite y promueva una relación simétrica, horizontal entre los interlocutores/participantes de la experiencia. Se trata básicamente de encontrar los posicionamientos enunciativos adecuados para promover el coprotagonismo de quienes otras concepciones fijan en el rol pasivo de “beneficiarios” o “destinatarios”, reconocer al otro como sujeto activo y propiciar el “hacer con” más que el “hacer para”. Este dispositivo enunciativo es fundamental, tanto para diseñar las actividades, como para realizarlas y también para evaluarlas. Es un desafío derivado de los tres pilares que sustentan el marco teórico: la pedagogía emancipatoria (Jacotot-Rancière), la concepción de lectura como ejercicio autorrevelador (de Certeau, Petit, Montes) y la pedagogía del aprendizaje-servicio (Tapia, CLAYSS). El equipo De UNA es una compañía artística itinerante que conforma elencos circunstanciales en espacios comunitarios. Constituye un grupo heterogéneo en edades, intereses, motivaciones, trayectorias laborales, artísticas y profesionales y roles adentro de la universidad. Pretende operar hacia adentro del equipo con la misma horizontalidad que promueve en las experiencias de arte comunitario. El análisis enunciativo atraviesa el proyecto en todas sus fases y constituye una herramienta fundamental para el cumplimiento de sus metas. El aprendizaje-servicio en artes es una oportunidad óptima para propiciar el diálogo, el encuentro y la construcción colectiva, para vincular las prácticas artísticas tradicionales y las manifestaciones emergentes del arte contemporáneo, en experiencias de intervención social en las que los estudiantes asumen el rol de gestores y creadores junto con otros.